Triste muy triste
Si en verdad decimos ser Católicos prácticantes debemos depurar de la liturgia lo que no es Católico.
Y a los que no podemos al menos con nuestros actos respetar el Rito del Sacrificio de la Misa porque a pesar del dolor que nos causa a algunos de nosotros ciertas características del Rito nuevo ordo, Cristo se hace presente en ella no debemos fomentar el error debemos comportarnos sabiendo que a pesar de todo él está ahí.
Y como lo dijo alguna vez el Santo Padre Pío dejemos de aplaudir y de pensar que el rito de la Misa es una fiesta, porque mientras Jesús era clavado en la cruz y moría por nosotros los únicos que aplaudían: Los demonios y los soldados y todos los que se burlaban en ese momento del acto de amor más grande de Dios por nosotros.
La Iglesia Católica tiene otros ritos que también son válidos entre ellos el otro Rito Romano que es el de la Misa tradicional, por ahora al menos que este Rito nuevo ordo o se respete de principio a fin, es decir rúbricas Rito mi sal y hasta la explicación del Misal romano dejemos de incrustarle cantos no litúrgicos ni católicos para convertirlo como se está haciendo en una expresión protestante.
Que lo único que está formando es gente que da cada día desconozca más la presencia real de Cristo en la Eucaristía
En este enlace se reproduce una supuesta no sabría decir misa o eucaristía luterana pero los verdaderamente triste es lo que se parece al Rito nuevo ordo Y en este caso particularmente los cantos luteranos que ha absorbido tristemente el Rito nuevo ordo de la Misa Católica.
No es para irnos en desbandada de la Iglesia Católica, no es para tomarle tiria a la Misa, es para que los que pueden depuren todo este error litúrgico, y mientras esto sucede Dios lo permita, reparar con el adecuado comportamiento en Misa de nuestra parte, entendiendo que la Misa es la presencia Real de Cristo de manera puntual en la transustanciación, y que en el Eterno presente de Dios estamos acompañando a Nuestro Señor Jesucristo en su vida, pasión, muerte y resurrección por la salvación de nuestras almas..
NOTA: la Iglesia Católica goza de la sucesión apostólica.
Es decir que los sacerdotes católicos cuando ejerce su ministerio en unión con nuestro señor Jesucristo se hace presente en la hostia consagrada.
Pero tristemente para los luteranos, esa hostia no tiene la presencia real de Cristo.
Pidamos en nuestras oraciones siempre para que el rito de la misa sea depurado, y nuestra identidad católica no sea Aguada por el modernismo.
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